Las ventas a Asia superaron por primera vez los 200 millones de litros y los 300 millones de euros y ya representa el 9% del volumen y el 11,4% del valor total exportado, cuotas nunca antes alcanzadas. China lideró este aumento y se distancia de Japón como principal mercado asiático, en un gran año para Taiwán, Hong Kong, Vietnam o Singapur.

Las exportaciones a Latinoamérica aumentaron de forma similar, hasta rozar los 60 millones de litros y los 145 millones de euros, también sus máximos históricos. Representó el 2,6% del volumen y el 5% de la facturación total. México supuso más del 40% de las ventas a esta región, si bien fue Brasil, segundo mercado, el principal protagonista de la subida global. Crecen a buen ritmo las ventas a la República Dominicana, Colombia y Argentina, entre otros. Tanto Asia como Latinoamérica son dos mercados liderados por los vinos envasados, de ahí que ambos registren precios superiores a la media española, sobre todo la segunda.

Por el contrario, los vinos sin indicación, productos con menor valor añadido, representaron más del 90% del volumen total exportado a África, de ahí que el precio esté lejos de la media española. Las exportaciones al continente africano volvieron a crecer en 2017 tras cuatro años de caídas. Las ventas crecieron el doble en valor (+21,3%) que en volumen (+10,3%). Países como Togo, Nigeria, Marruecos o Camerún lideraron el aumento global, con Costa de Marfil un año más como primer mercado pese a reducir sus compras de vino español.

Por otra parte, la OIV estima una producción mundial de vino en 2017 de 250 millones de hectolitros. Condiciones climáticas adversas, especialmente en Europa, afectaron a la producción. Respecto al consumo, se estima en 243 millones, según su nota de coyuntura de abril.

Fuente: OEMV